AULA DE CULTURA, AL FIN...
a debate..........
Queridos todos:
Anoche llegué de vuelta a casa después de haber pasado unos días en
la isla griega de Rodos y, como aún llevo dos horas de adelanto con respecto al
horario británico, me desperté a las 7, así que me puse a leer los 50 emails
que se me han acumulado.
Antonio, no sé si tendré tiempo de contestar por escrito a todo el
material que me has presentado. Claro que sería interesante analizar el
fenómeno Podemos desde un punto de vista sociológico. En principio, parece ser
la típica respuesta de las masas sociales a un período continuado de depresión
económica como el que estamos viviendo. Los artistas/profetas que lo lideran
(como ha ocurrido siempre, desde incluso antes de la revolución francesa), y
como seguirá ocurriendo (y que es, por otra parte, lo que debemos esperar de
ellos), aportan una visión idealista y no enteramente racional de posibilidades
de acción social/política. Lo lógico, por lo tanto, es que haya un período de raised expectations,
debido a sus promesas irrealizables, que provocarán por consiguiente una etapa
posterior de frustración social; lo que ocurra a partir de ahí es más
imprevisible.
Para mí Podemos perderá credibilidad si empieza a mezclar una
visión socialista (que comparto hasta el punto de que sea realizable en un
contexto de globalización de las élites; es decir, que está cada vez más
difícil) con una nacionalista que debe ser, por definición, contraria a un
socialismo integrador (sea marxista o social demócrata): el nacionalismo crea
tribus contrarias a la visión de un proletariado internacional y, en el caso
catalán, está engendrando extranjeros en su propio país (creo que los
aragoneses, como vecinos de su nacionalismo expansionista, somos más
conscientes de ello que cualquiera de vosotros), usando el idioma como herramienta
de estratificación, movilidad social y acceso a los mecanismos de poder. El
nacionalismo, sin embargo, sirve muy bien a los políticos; es una ideología
perfecta para enardecer a las masas y desviar su atención de lo que están
haciendo. Acaso las élites catalanas no depositan en Suiza o invierten fuera de
España los millones que han acumulado con el sudor de muchos españoles desde
los años 60?
Veo que no me expresé con claridad sobre el tema de las
instituciones democráticas, que no se pueden separar de la cultura que las
genera. El hecho de que las instituciones de la monarquía saudí no sean
democráticas no se debe a que sea una monarquía, sino al proceso histórico del
país. Lo mismo se puede decir de varias “repúblicas” bananeras. El tema es por
lo tanto irrelevante. Lo importante es que el país haya desarrollado una
cultura democrática. Para ello es imprescindible educar a los ciudadanos en el
respeto mutuo y la solidaridad, lo cual no está ocurriendo en las escuelas
catalanas (en las vascas no lo sé); de lo contrario, estamos condenados a
repetir los errores del pasado. Elegir a unas élites nuevas para que “den la
vuelta a tortilla” mientras el resto de nosotros eludimos nuestras
responsabilidades no llevará a ninguna parte.
Estamos de acuerdo en que el modelo actual no funciona, pero no
podemos cambiarlo sin haber hecho una reflexión exhaustiva. Avísame, Antonio,
cuando Podemos publique análisis serios sobre (1) las diferencias entre el caso
escocés y el catalán, (2) lo que consideren factible, caso de que asuman el
poder político en España, dentro de una economía (a) globalizada y (b) más o
menos dictada por el complejo político/bancario alemán, y (3) sus propuestas
institucionales para una participación política responsable de las bases.
Entonces les prestaré atención si se la merecen.
El que dice lo de la salida al mar de Aragón debe ser mu tonto (producto,
sin duda, del sistema educativo actual), a no ser que las comarcas del Delta
opten por unirse con Aragón, como pudo haber sido a partir de la conquista de
Tortosa (pero eso es otra historia).
Venga, un fuerte abrazo.
Luis.
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Hola
D. Luis y demás discretos miembros del foro:
Te
supongo ya de vuelta en la Gran Bretaña después de vuestro periplo por Iberia
(para no tener que decir “por España, incluyendo a Cataluña”).
Confieso
que vuestro viaje me ha servido de excusa para retrasar mi respuesta (tampoco
los demás se dan mucha prisa ) a tus
sesudas reflexiones y, la verdad es que todavía no sé muy bien cómo montármelo.
Lo
que sí tengo bastante claro es que me parece que no va a ser fácil lograr una
coincidencia de puntos de vista sobre temas tan candentes, teniendo en cuenta
que yo estoy aquí, viendo cómo la gente rebusca en los contenedores de basura
(se dice que quieren multar con 700 € la actividad), mientras que tu punto de
vista es el del académico intelectual que desde lejanas tierras observa la
situación y los acontecimientos con la fría objetividad de quien quiere y se lo
puede permitir. Es decir, que en tu caso predomina el raciocinio cerebral, en
tanto que a mi me pueden las emociones o las tripas. Pero, me perdonarás que
opine que caes en una cierta contradicción cuando dices desde tu alto
observatorio que “Elegir a unas élites nuevas para que “den la vuelta a tortilla”
mientras el resto de nosotros eludimos nuestras responsabilidades no llevará a
ninguna parte”. Por cierto, hace mucho que leí que no hay que darle la vuelta a la
tortilla sino hacer una nueva, porque la actual tortilla es una caca, y una
caca al revés es la misma caca.
Creo
que has dejado bastante clara tu visión del “fenómeno Podemos”, lo que esperas
de ellos y el futuro que les auguras. Me parece evidente que todo ello sigue
siendo consecuencia de lo comentado en el punto anterior sobre la atalaya desde
la que miras. No seré yo quien defienda a Podemos; no tengo por qué hacerlo, ya
que ni siquiera me he inscrito ni estoy participando en votación alguna. Sí que
estoy observando los aconteceres con toda mi atención (también tengo mis dudas,
pero de otra clase), porque creo que algo importante se está gestando. De todas
formas, y quizás porque me falta esa objetividad que tu sí puedes tener, yo no
me atrevería a llamar “típica respuesta” a un proceso del que nadie recuerda
por aquí algo parecido, ni a profetizar (aunque tú llamas “profetas” a sus
líderes) lo que ocurrirá en el futuro, porque ha ocurrido siempre (?) o la
frustración social que nos espera tras el período de raised expectations. Y, a
pesar de que también dices que “Para mí Podemos perderá credibilidad...”, no parece que les
concedas mucha, francamente. Quizás lleves razón.
Lo
que sí te veo es francamente preocupado por la cuestión catalana pues, tanto si
analizas el tema de Podemos como si glosas el asunto de la Monarquía, acabas
sacándola a relucir. Me alegra coincidir contigo en tu visión sobre el
nacionalismo, al que yo considero profundamente retrógrado. Pero esa no es la
cuestión ni, que yo sepa, ha sido planteada por Podemos hasta la fecha. El tema
es que los que no somos nacionalistas, independentistas ni nada por el estilo,
sí que podemos estar a favor del derecho de autodeterminación. Y,
afortunadamente, tu amigo Paul Preston me libera a mí de la tarea de
desarrollarlo porque te lo puede explicar él mismo (infinitamente mejor que yo,
sin duda), tal como se deduce del contenido del siguiente enlace:
Finalmente,
en lo que toca al sempiterno asunto de la Monarquía-República, solo te diré que
fuiste tú quien, en tu correo del 4 de Julio de 2014 dijiste: “No creo que haya más
democracia en la República francesa que en la monarquía sueca” por lo que no me
cuadra mucho que digas ahora que “El tema es por lo tanto irrelevante”.
Bueno,
creo que hoy ya me he pasado de “pesao”, aunque espero que las discrepancias
que han podido aparecer queden en el marco de la cordial amistad que sin duda
nos une, aunque haya estado interrumpida durante unos 40 años.
Un
fuerte abrazo
Antonio
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Fernando también se apunta....
A estas alturas del partido hay otra cuestión: la panda de
sinvergüenzas que nos dominan (diferente de eso de que “nos gobiernan”). Además
de la mayoría en el Congreso y Senado, han copado la jefatura de los jueces,
del Constitucional, del Supremo… es decir, tienen TODO EL PODER y lo ejercen
con impunidad, “que es como tiene que ser….”. Llevan años degradando la
democracia y, como herramienta importante, el lenguaje, de forma que “cale como
lluvia fina” y se consiga una sociedad adormecida y conformista.
Me parece impresionante que, con toda la mierda que está
saliendo (y la que queda por salir), el país entero no salga a la calle a por
todos los ladrones. Al final, la derechona está consiguiendo su mayor anhelo:
hacer grandes negocios con la ley en la mano. Y si hay problemas con la
justicia, se obstruye lo que se pueda y, en último caso, siempre están los
indultos (para los amigos, claro). Si esto es propio de una sociedad
desarrollada, que paren el país, que me bajo.
Aunque sea una razón negativa ¿alguien puede decirme qué
alternativas hay a los partidos/basura actuales? Porque hace falta corazón para
que un 27% siga pensando en votar PP o un 25 al PSOE (de IU y Doña Rosita, ni
mención). Debe ser que en España hay un gran número de viejos de derechas o que
la inercia del voto es absoluta.
Me encanta ver al .....tro de Rajoy prometiendo
regeneración democrática (o al Arturo Fernández queriendo hacer el código de
buenas prácticas empresariales (toma ya!) o a la lideresa con cara de inocente
diciendo que ella no sabía nada, o escuchar a la Báñez diciendo que baja el
paro (¿no será que aumenta la emigración?)… en fin, los trampantojos con que
nos están bombardeando, aunque parecería que ahora somos menos crédulos (pero
falta todo un año para las generales).
Quizá no sean muy comparables, pero habría que ver el
programa con el que el PSOE ganó las elecciones del 82 y lo que puede salir del
programa de PODEMOS (en términos de “idealismo” o “promesas irrealizables”). El
hastío que provocan las instituciones puede hacer que lo que empezó como
movimiento social se convierta en una fuerza transformadora, aunque no soy muy
optimista respecto a los resultados. Y no olvidemos que fue el propio PSOE el
que desmanteló los instrumentos de participación ciudadana que le ayudaron a
llegar al poder.
Y el tema del nacionalismo catalán… me tiene ligeramente
harto. Si partimos de la insolidaridad como premisa, estoy de acuerdo en que
tienen el “derecho a decidir” (que alguien me explique qué es eso, como lo del
“conflicto vasco”). Pero los demás también lo tendremos. RAZONANDO CON LAS
TRIPAS, me encantaría ver al Junqueras (“El derecho a votar es anterior a las
leyes, es como el derecho a la vida…” dijo en EL MUNDO) declarando la
independencia. Sería el momento perfecto para dinamitar puentes y carreteras y
establecer las aduanas correspondientes. Y, de paso, hacer un canal desde el
pantano de Mequinenza hacia Valencia y Murcia y mandarles una meadica de gato
por el Ebro. España lo pasaría mal… pero que ellos también lo sufran. ¿Cómo han
podido manipular de esa forma a la gente? Lo de los sentimientos es un
auténtico misterio. Repito: esto no es racional sino mala uva contra el
nacionalismo.
En fin, no me parece mala idea lo de reunirnos otra vez en
mayo. Para entonces ya estará hecho el pacharán, así que… Besos y abrazos para
todos y perdonad el rollo.
!Esperamos todos que el pacharán esté hecho para Mayo¡... un abrazo.
